El área de Maternidad del Hospital Universitario Punta de Europa, en Algeciras, llevaba más de 40 años sin reformarse por lo que los espacios obsoletos, diseñados bajo criterios de atención al parto de hace más de cuatro décadas, estaban frenando la actualización del centro hospitalario en este servicio. Dar un cambio radical a esto fue el objetivo por el que sus gerentes, tras la demanda y solicitud del equipo de matronas, eligieron a Virai Parra-Müller, estudio de arquitectura y consultoría para proyectos y obras en las maternidades hospitalarias desde un enfoque saludable y el Diseño Basado en la Evidencia.
“Los entornos de las maternidades tienen un efecto directo en la mejora de la atención obstétrica. La arquitectura de estos espacios debe conseguir atmósferas amables, que satisfagan las necesidades de las mujeres de parto y de los profesionales que trabajan en ellas. Llevamos más de 15 años trabajando en la transformación de estos espacios. Cuando comenzamos, nadie prestaba atención a estas áreas. Ha cambiado el paradigma. La atención profesional al parto ya no es tan medicalizada, la evidencia científica se ha impuesto, las mujeres exigen partos respetados y era cuestión de tiempo que el diseño también se uniese a dicha transformación”, explica Marta Parra, socia cofundadora del estudio.
Para conseguir esto son muchas las variables que entran en juego, pero una selección acertada de los materiales y acabados a emplear es una de ellas. “Partiendo de la funcionalidad y la seguridad, desarrollamos los entornos cálidos y positivos a través de los acabados, de los materiales, los revestimientos y equipamiento. Los espacios nos envuelven, nos tocan. Y en este entendimiento de una arquitectura háptica, los colores, las texturas, la temperatura de cada material, incluso sus condicionantes de sostenibilidad y salubridad, funcionan como vasos comunicantes del exterior al interior, nos transmiten información, y modulan nuestra percepción y vivencias”, continúa la arquitecta.
Desde la puerta de entrada, la nueva área de Maternidad rompe con todo lo anterior, y diseña una zona de Obstetricia basada en las necesidades, a través de una ordenación de los espacios de modo que las salas de parto son concebidas como lugares únicos en los que la embarazada pasa todo el parto sin ser desplazada, con luz natural, vistas al exterior, y un ambiente acogedor, doméstico, natural.
Cada una de las cuatro salas de parto es diferente, tanto en la forma como en el color de los azulejos que, de manera decorativa, ambientan y zonifican el paritorio. Cada sala está equipada con el material médico necesario, pero no a la vista y con elementos para favorecer el parto fisiológico. El área cuenta, además, con un quirófano para cesáreas, y sus espacios auxiliares necesarios.
La zona central de control permite una visión 360 del área, incluidas las salas de reconocimiento, que funcionan como parte de las Urgencias Obstétricas, las cuatro salas de parto y el paso a quirófano en caso de emergencia.
El proyecto convierte, en definitiva, un área tradicional y anticuada en un referente de humanización en los hospitales andaluces para la atención al parto actualizado. A través de un diseño que permite disfrutar de las vistas exteriores del hospital, incluido el Peñón de Gibraltar, que incorpora espacios concretos para los acompañantes de las madres, y que cuida de los profesionales a través de un entorno cálido y funcional, que permite mejorar las experiencias de las mujeres y sus familias, a través de partos y nacimientos más saludables y seguros. “Con nuestro equipo seguimos innovando, repensando y desarrollando proyectos muy singulares y novedosos, incorporando más calidez, para conseguir más calidad. La humanización, basada de verdad en las personas, en las mujeres”, se explaya la arquitecta.