El festival bilbaíno cumple su décimo aniversario abriendo las puertas al monte de Kobetamendi a unas 120.000 personas que durante este fin de semana disfrutarán de las actuaciones de artistas y grupos del panorama nacional e internacional como Dover, Mumford&Sons o Alt-J, celebrando también la persistencia en el tiempo del evento musical.
A pesar de tratarse de una edición especial sin demasiadas sorpresas que conozcamos aún, la mayoría de entradas y la totalidad de los bonos están vendidos desde hace varias semanas. Esto hace vislumbrar una gran acogida por el público que año tras año ha perfilado sus gustos y sus preferencias en los escenarios del festival.
La situación complicada de la música ha hecho del Bilbao BBK Live un mérito reconocible por el sector pues la asistencia a las diferentes ediciones se han ido sucediendo de manera exponencial. Mucha de esta repercusión se basa en la elección de bandas, por las laderas del monte han pasado R.E.M., Metallica o Rammstein pero fue en 2012 cuando el certamen apostó por una oferta musical más generalista y, en ocasiones, sonidos más indies como Radiohead, The Cure o Keane. El evento ha dado un paso de gigante y se ha convertido en la competencia directa de festivales con tanta trascendencia como el Festival Internacional de Benicàssim.
Esta misma tarde da comienzo su edición número diez con un cartel no digno de una fecha tan señalada pero al que la banda británica Muse ha dado un buen empujón. No serán estos ingleses los que encabecen el primer día sino la banda de Marcus Mumford que defenderán en el escenario Bilbao Stage su nuevo y controvertido Wilder Mind. A ellos les acompañarán horas antes unos Future Islands rebosantes de energía donde las guitarras tendrán más protagonismo. Black Rebel Motorcycle Club, Triggerfingers y Dover pondrán las notas más rockeras de esta jornada.
El viernes los ritmos de rap vendrán acompañados de la estadounidense Azealia Banks, que precederá a James Bay, Catfish & The Bottlemen, y Ben Harper & The Innocent Criminals. El doble cabeza formado por The Jesus & Mary Chain y Alt-J se convertirá en el principal reclamo de los asistentes. El sábado, el último día del evento, Muse destaca sobre el resto de los artistas aunque Vintage Trouble, The Ting Tings, Of Monsters and Men y Kodaline compartirán la atención del público con los de Matt Bellamy.
Tatiana Moro